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Restaurante Kirei, el Sol Naciente de la T4

Kirei, de la cadena Kabuki, es el primer restaurante japonés que abre sus puertas en un aeropuerto en España.

En el área de restauración de la T4 del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid – Barajas, un haz de luz que mana del mismísimo Sol Naciente parece haberse colado entre los grandes plafones de luz artificial, arrojando grandes dosis de autenticidad en un panorama gastronómico dominado por un tipo de comida rápida fuertemente estandarizada a base de sandwiches, bocadillos y hamburguesas. El responsable de este renacer tiene nombre y apellido: Kirei by Kabuki.

Es propio de la condición humana tender a dar por sentados determinados conceptos por el simple hecho de prevalecer en el tiempo. Que los aeropuertos son lugares en los que el comer es un mero trámite, es uno de ellos. Y es que, aunque seguramente la mayoría de la gente que transita por los pasillos de cualquier aeropuerto en busca de un restaurante, se conforma con «matar el hambre» con cualquier cosa que le satisfaga lo más mínimo y que no cause demasiados estragos en su billetera, siempre hay quienes antepondrían la calidad y el deleite a cualquier otro factor, incluso en el contexto apresurado aparentemente deshumanizado de un aeropuerto.

Por eso es digno de elogio que José Antonio Aparicio y Ricardo Sanz, socios y dueños de Kabuki, hayan tenido la valentía de evadirse de lo convencional, poniendo las bien conocidas dotes culinarias del segundo al servicio de los paladares más exigentes de la Terminal 4 del aeropuerto de la capital de España.

Fue hace escasos días cuando tuve la posibilidad de recrearme con las muchas sorpresas que esconde el selecto y no demasiado abundante menú (siempre he preferido la calidad a la cantidad, también en el número de platos) del Kirei by Kabuki, en compañía de otros bloggers: Liliana Fuchs, de Directo al paladar; Guadalupe de la Vallina, de Hello Lupe; Paco Becerro, de Lazy Blog; Edy Costero, de Blog Vivant; Martín López, de Madrid Diferente; Roger Ortuño, de Comer Japonés; Jesús Canales, de Gastrotxusan; y Carlos Javier, de A la Buena Vida.

Encuentro de bloggers gastronómicos en el Kirei by Kabuki
Bloggers asistentes al encuentro en el Kirei by Kabuki

Mi experiencia en el restaurante Kirei

A pesar de las limitaciones impuestas por el escenario, el restaurante Kirei cuenta con un espacio acogedor y un servicio rápido y eficaz capaz de dar respuesta a las necesidades de los viajeros. En el interior de las cocinas, donde más se ha acusado el veto a determinadas formas de hacer las cosas, ha sido necesario echar mano de algunos de los últimos «artilugios tecnológicos» como, por ejemplo, los hornos eléctricos de carbón (sin emisiones) que permiten dar cabida en la carta a unas inesperadas brochetas a la parrilla.

Después de probar una de ellas, un tako yaki de pulpo en el que eché de menos un poco más de mimo en la cocción, dimos inicio a una secuencia de platos que conformaron un completo menú degustación en el que tuve la impresión de recibir pequeños impactos de goce sensorial de una intensidad creciente cada vez.

Dimos inicio al mismo con una ebi salad en la que el marisco, envuelto en un crujiente rebozado y rociado con una sabrosa salsa, desató en mis adentros esa misteriosa sensación de «ganas de más» que siempre ha despertado en mí la buena comida japonesa.

Ebi salad, Kirei Kabuki
Ebi salad

Continuamos con un usuzukuri ponzu con un corte impecable y una frescura en el pescado que es seña de identidad de la casa, y que estuvo presente a lo largo de todo el menú.

Usuzukuri Ponzu, Kirei Kabuki
Usuzukuri Ponzu

Los dos usuzukuris que siguieron a continuación son una fenomenal muestra de los suspiros por algunos de los clásicos de la gastronomía española que, sin llegar al concepto de cocina fusión, se dejan notar en la cocina japonesa de Ricardo Sanz. El primero, un usuzukuri bilbaína, agradable mezcla de contrastes de sabor y textura.

Usuzukuri bilbaína, Kirei Kabuki
Usuzukuri bilbaína

El segundo, un usuzukuri con papa y mojo canario en el que parece repetirse ese baile exótico perfectamente coordinado entre la delicadeza de una geisha y el genio de un flamenco.

Usuzukuri papa y mojo, Kirei by Kabuki
Usuzukuri papa y mojo

El guiño entre culturas, una inteligente apuesta bien acogida por el comensal español y por los propios japoneses, continuó con los dos platos siguientes: un salmón con retazos de pa amb tumaca y un bol de atún con huevo y patatas cuyo exquisito sabor aún pervive en mi memoria.

Pa amb tumaca, de Kirei by Kabuki
Pa amb tumaca

Como veis, el restaurante Kirei invita a todos sus clientes a usar palillos para comer, si bien existen cubiertos a disposición de quienes así lo prefieren. A este respecto, y teniendo en cuenta mi escasa habilidad para su manejo, tengo que decir que el esfuerzo es bien recompensado ante la -a mi juicio- necesidad de comer a pequeños bocados y entregarse a los ritos de una cultura gastronómica con un altísimo sentido estético, en la que todos los detalles cuentan.

Bol de atún rojo, Kirei by Kabuki
Bol de atún rojo

La trilogía de nigiris -muy bien acogida por la clientela- está compuesta por un nigiri de paté de trufa blanca con huevo frito de codorniz, otro de hamburguesa de buey y otro de pez mantequilla. El primero y el último -ambos se deshacen en la boca como verdaderos pedazos de mantequilla, creando una mezcolanza de sabores sencillos y deliciosos al mismo tiempo- me parecieron especialmente destacables.

Trilogía, Kirei by Kabuki
Trilogía

Por último, el festival de las buenas maneras tuvo su momento culmen con dos futomakis – de huitlacoche y de anguila- y un nigiri de toro que, sin referencia alguna a la comida de nuestros recuerdos, son el broche perfecto para soltarnos de la mano definitivamente en el territorio de una cocina exótica que no deja indiferente a nadie, interpretada con suma pulcritud y respeto.

Nigiri de toro, fotomaki huitlacoche y futomaki anguila, de Kirei by Kabuki
Nigiri de toro, fotomaki huitlacoche y futomaki anguila

De mi experiencia en el restaurante Kirei by Kabuki, más allá de lo puramente sensorial, destacaría la altísima calidad y el exquisito trato a una materia prima que no deja de ser protagonista en ninguno de los casos.

Restaurante Kirei by Kabuki

Terminal T4. Planta 1. Salidas. Zona de embarque J

Cómo llegar

Teléfono de información: 620 266 405

Curiosidades: dispone de servicio take away y sólo sirven comidas -no cenas-, aunque se prevé servicio de cenas en un futuro próximo.

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3 comentarios en “Restaurante Kirei, el Sol Naciente de la T4

  • 8 octubre, 2014 a las 15:46

    Impresionante reportaje y gran calidad fotográfica. Dan ganas de comerse las fotos! Para cuando un post de comida italiana? Si os gusta tanto como a mi os recomiendo http://www.divusgourmet.es Un saludo!

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    • 9 octubre, 2014 a las 8:56

      Muchas gracias, Divus. Si quieres comerte alguna foto, tienes mi permiso, pero procura dejar algunos píxeles para el resto… 😛 Sobre la cocina italiana hemos tratado temas puntuales, pero es cierto que tenemos pendiente hacer un repaso más a fondo. Me lo apunto. Un saludo.

      Respuesta
  • 5 octubre, 2016 a las 16:33

    Muy buen artículo, tanto que no queda otra alternativa que ir a visitar el restaurante, imposible no hacerlo con las fotografías que han tomado, de acuerdo totalmente con el amigo que comentó anteriormente, provoca comerse las fotos,y tambien coincido con su petición de algo más de comida italiana, es mi preferida.
    Mientras me conformaría con echarle diente a ese ebi salad, mientras espero…

    Respuesta

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Ricardo Ojalvo

Se define a través de sus recetas y artículos como un consumidor consciente y un amante de la cocina dominado por la curiosidad, comprometido con la causa de los platos fáciles, rápidos, ricos y sanos. Su pasión de eterno aprendiz es la sal de sus publicaciones, y su humor, la pimienta.