Las 5 claves del éxito para preparar la cena de Navidad

En Cocina.es siempre decimos que las comidas de diario son las más importantes de la familia, son las que acaban definiendo nuestro modelo alimenticio, y por tanto, las que se deben adecuar a nuestras necesidades por cuestiones de salud. Pero donde uno se juega el prestigio, es en una comida o cena de Navidad.

Si lo que tenemos pensando hacer como plato principal es importante, nosotros pensamos que la clave del éxito para preparar la cena de Navidad idónea está en controlar todo. Puedes permitirte no ser sobresaliente en una cosa, pero al menos tienes que intentar ser notable en todo, y para eso debes tener en mente buenas ideas de entrantes para Navidad originales y ricos, un plato principal de garantías, ciertos conceptos sobre la decoración de la mesa, etc.

Cómo preparar una cena de Navidad de éxito

Por tanto, no vamos a hablar de una clave, sino de 5 claves del éxito de una cena de Navidad, aplicables a todo tipo de situaciones. Toma nota a todo esto:

  • Debes ser previsor
  • Cuida mucho los entrantes
  • No te la juegues con el plato principal
  • No improvises con la bebida y el postre
  • Decora tu mesa con gusto y cariño

Te explicamos cada aspecto por separado, para que no te quede ninguna duda de a qué nos referimos por triunfar en la cena de Navidad.

1. Ser previsores, primera clave del éxito

La cena de Navidad no es algo que podamos dejar a la suerte de la improvisación. Al menos con un mes de antelación, debemos tener ya bien pensado y decidido qué vamos a hacer como plato principal, qué vamos a hacer de entrantes, qué vamos a hacer de postre, cómo vamos a decorar la mesa, etc.

Y una vez que lo tengamos todo claro, podemos ir comprando ya los ingredientes que se puedan comprar, los que se puedan mantener congelados, etc. También iremos haciendo pruebas con las elaboraciones que no hayamos hecho antes, para evitar sorpresas de última hora.

Además, comprar los ingredientes de nuestra cena de Navidad con algo de anticipación, nos puede suponer un ahorro significativo.

2. Mucho ojo con los entrantes de la cena de Navidad

Eso de que sean «comidas menores» o en «pequeño formato», hace que muchos se confíen y se acaben equivocando bien a la hora de decidir qué entrantes hacer para la cena de Navidad, o bien a la hora de prepararlos, por falta de experiencia.

Por tanto, hilando con lo anterior, te recomendamos que seas previsor y que pongas mucho ojo con los entrantes. De hecho, unos entrantes bien escogidos teniendo en cuenta la comida principal, son fundamentales para que todo empiece como debe empezar.

Lo ideal es que sean entrantes que se puedan preparar con cierta antelación y no pierdan presencia, o de lo contrario, que se puedan preparar fácilmente sobre la marcha sin suponerte un estrés en los momentos clave.

3. Apuesta sobre seguro con el plato principal de tu cena de Navidad

Para el plato principal de la cena de Navidad podemos apostar por carne o pescado, por el clásico pavo navideño o por una merluza, un rape, un arroz con bogavante, etc. Hay muchos platos clásicos en las cenas de Navidad.

pavo ahumado se leva

Es importante elegir una comida de cierta categoría, que no sea algo «de todos los días», pero por encima de todo, es vital que sea una comida que tengamos dominada, que la hayamos hecho muchas veces antes y no nos la tengamos que jugar con experimentos.

Controlar las cantidades, los tiempos y la temperatura de cocción, es absolutamente imprescindible. Así que volvemos a lo mismo: si no lo has hecho antes, o lo has hecho, pero no lo tienes dominado, haz el plato principal de tu cena de Navidad unas semanas antes a modo de «experimentación», y corrige errores si es necesario.

4. La bebida y el postre de la cena de Navidad también se merecen una «pensada»

Al igual que los entrantes, la bebida y el postre, en ocasiones, quedan desplazados a un segundo plano en algunas casas en cuanto a nivel de intención, de atención y de cariño. ¡Y esto no puede ser! Si queremos aspirar a una cena de Navidad perfecta como anfitriones, la bebida la tenemos que pensar en base a lo que vayamos a servir como plato principal, y con el postre debemos ser igualmente cuidadosos.

Si quieres algo original con la bebida, la sangría de cava es una idea que dimos hace algunas navidades y que siempre nos han agradecido. En cuanto al postre, teniendo en cuenta el trabajo que lleva todo lo demás, nosotros apostaríamos por algo que se pueda dejar hecho unos días antes como estos vasitos de tiramisú de manzana, un postre clásico como un flan casero, o incluso por unas bolas de helado (que gustan a todo el mundo) bien presentadas con sus virutas y sus barquillos, etc.

5. Decoración de la mesa: con poco, se puede hacer mucho

No todo es lo que atañe a la comida en sí. Está comprobado que en un ambiente propicio, cuidado con esmero, la comida gana muchos enteros… todo sabe mejor, se disfruta más. Por eso, y también con cierta previsión, tienes que pensar también en la forma de decorar tu mesa en la cena de Navidad poniendo atención a los colores, a las luces, etc.

Ante la duda o la inexperiencia, un bonito centro de mesa y unos pequeños toques de estilo como las servilletas, serán siempre mejor que un intento de agradar a base de toques grandilocuentes, que sobrecarguen la mesa en exceso. Menos es más si está bien pensado.


¿Qué te ha parecido? ¿Estás de acuerdo con nosotros? ¿Quieres aportar tus propias ideas para que todo el mundo pueda leerlas? Todos los consejos del mundo son pocos, si el objetivo es organizar la cena de Navidad perfecta. ¡Mucha suerte con la tuya, y feliz Navidad!

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